¿Cómo quitar el mareo después de un viaje en barco?
El mareo puede ser bastante engañoso. Cuando te embarcas en tu emocionante aventura marítima, la emoción está en su punto más alto, pero una vez que el barco se adentra en aguas abiertas, es posible que sientas esa desagradable sensación de mareo, deseando simplemente acostarte.
Aunque no resulta muy agradable, sorprendentemente, el mareo afecta a casi todos los navegantes de alguna manera. Algunos tienen la suerte de experimentar solo un ligero dolor de cabeza que desaparece después de adaptarse a la vida en alta mar (generalmente en unas pocas horas). Otros, por otro lado, podrían tener que despedirse de su almuerzo mientras se inclinan sobre la borda del barco.
¿Puedo marearme en un crucero?
La respuesta es sí, incluso en un barco grande y tranquilo como un crucero una persona puede llegar a marearse. Por suerte, hay algunos consejos que podemos ofrecerte para que la probabilidad de marearte sea inferior.
1- Elección de un camarote adecuado
Si vas a realizar un crucero por el Mediterráneo, lo primero que debes hacer es usar el buscador de cruceros de CrucerosMediterraneo. En el mismo no solo podrás encontrar el crucero que buscas, sino que te será fácil seleccionar el camarote que necesitas.
Escoger el camarote correcto puede marcar una gran diferencia cuando se trata de evitar mareos. Busca un camarote donde sea menos probable experimentar el balanceo y movimiento de las olas. Optar por uno ubicado en la mitad del barco y a una altura moderada es la elección más segura. Un camarote en el centro del barco con balcón para acceder rápidamente al aire fresco puede resultar ideal. Si no está disponible, considera una habitación más baja o cercana a la parte trasera, ya que la parte delantera del barco tiende a experimentar un mayor movimiento.
2- Apuesta por los cruceros con muchas paradas
Varios cruceros tienen distintos recorridos. Si tiendes a sentirte incómodo con el movimiento del barco, te convendría seleccionar un crucero que haga paradas en varios puertos y pase menos tiempo navegando de forma continua. Para tu primera experiencia en crucero, podría ser una buena idea elegir una duración más breve en general. Opta por un crucero de 2 a 5 noches en lugar de considerar la opción más extensa de 6 a 9 noches.
3- Evita el alcohol y la lectura
Echar un vistazo a un buen libro al lado del camarote puede resultar bastante relajante, aunque al igual que sucede al conducir, la lectura o el uso de dispositivos móviles pueden provocar malestar. Si tienes la intención de leer, es recomendable tomar descansos periódicos, levantar la vista y dirigirla hacia el horizonte. Además, es aconsejable mantenerse hidratado con agua y reducir, o mejor aún, evitar el consumo de alcohol para evitar un factor adicional que podría contribuir a sentirse desequilibrado.
¿Cómo puedo evitar el mareo en una embarcación?
Nuestros expertos en cruceros nos han dado una serie de consejos a través de los cuales es menos probable sufrir un mareo. Esos consejos no solo sirven para reducir las probabilidades, también ayudan a que los síntomas sean inferiores.
1- Respirar aire fresco
Puede sonar bastante evidente, pero respirar aire fresco realmente tiene un impacto positivo en despejar la mente. Si te encuentras en una posición más elevada en el barco y te expones al aire fresco, es menos probable que experimentes mareos. Él sugiere pasar tiempo en la parte delantera del barco para disfrutar de las vistas, o bien, solicitar sentarse en el camarote con el patrón, ya que generalmente es uno de los lugares más elevados en la embarcación.
No solo te ayudará a mantener la mente clara, sino que también te brindará la oportunidad de aprender sobre la navegación en un barco.
2- Tomar jengibre
Tomar jengibre puede ser una solución fácil y asequible para combatir el mareo, ya sea crudo, confitado o en forma de té. Esta práctica casera ha sido utilizada durante siglos, con evidencias de su uso por parte de los antiguos chinos.
Aunque no se comprende completamente por qué el jengibre es efectivo contra el mareo, diversos estudios a nivel mundial sugieren que puede reducirlo o incluso prevenirlo. Puedes incorporar fácilmente el jengibre a tu dieta en el mar, ya sea a través de diversas preparaciones, o si no eres fanático de su sabor, optar por cápsulas de jengibre. La clave está en encontrar la forma que mejor se adapte a ti.
3- Usa bandas de mar
Las bandas marinas, también conocidas como bandas para el mareo, son pulseras elásticas que cuentan con un perno de plástico adherido en su interior. Este perno aplica presión en un punto de acupresión que se cree puede aliviar las náuseas y los vómitos. Aunque la comunidad científica aún no ha llegado a una conclusión sobre la efectividad de estas pulseras marinas, algunos viajeros confían en su eficacia. Estas bandas son asequibles y se pueden encontrar fácilmente en las farmacias.
4- Mirar al horizonte
Este método funciona realmente bien cuando estás en tierra firme o tienes algún objeto fijo a la vista, enfocarse en el horizonte es una estrategia eficaz para controlar el mareo.
Puede sonar como un consejo tradicional, pero los científicos respaldan completamente esta sugerencia. El mareo por movimiento se debe, en parte, a señales sensoriales contradictorias que llegan al cerebro: tus ojos te dicen que todo está inmóvil (como el interior de tu camarote), mientras que el sistema de equilibrio en tu oído interno (el sistema vestibular) indica que estás en movimiento.
Dirigir la mirada al horizonte puede proporcionar a tu cerebro un punto de referencia, permitiéndole percibir tanto el movimiento del barco como el de tu propio cuerpo.
5- Medicación contra el mareo
Dado que el malestar en el mar proviene de la actividad cerebral, tu médico te puede proponer diversos medicamentos que pueden ayudar a tranquilizar los nervios del oído interno o a inhibir la respuesta del cerebro que provoca el vómito. Generalmente, estos medicamentos se presentan en forma de pastillas, las cuales debes tomar antes de que aparezcan los síntomas de mareo. Es importante mencionar que estas pastillas pueden causar somnolencia como efecto secundario, por lo que es recomendable hablar con tu médico o farmacéutico para determinar cuál sería el medicamento más apropiado para ti. En caso de que las pastillas no sean de tu preferencia, también puedes optar por parches de liberación prolongada (conocidos como escopolamina), que se colocan fácilmente detrás de la oreja.